¿Tu casa está lista para ponerla en venta?
Cuando decides vender tu piso por tu cuenta, preparar la vivienda antes de la venta puede ser una tarea algo compleja y requiere de cierto tiempo y de una inversión económica para obtener buenos resultados. No obstante, si se hace adecuadamente, la recompensa está clara: habrás vendido tu inmueble en poco tiempo y a un buen precio.
Las pequeñas reformas, las renovaciones de ciertos materiales y la decoración marcan la diferencia en cuanto al número de personas interesadas por la vivienda. Cuantas más visitas recibas, más probabilidades tendrás de realizar la venta.
Tan solo con dar un toque de pintura a las paredes apostando por colores claros o cambiando la decoración para hacerla más neutra, favorecerás que tu casa sea del gusto de la mayoría. Es importante evitar muebles y objetos que sobrecarguen las estancias, cortinas que no dejan pasar la luz y habitaciones vacías que den un aspecto triste y no tengan encanto.
A continuación, te explicamos cómo puedes preparar tu piso para la venta y transmitir calor de hogar gracias a pequeñas reformas y cambios en el aspecto general de tu vivienda para que cualquier persona tenga ganas de mudarse solamente con verla.
Las principales reformas que marcan la diferencia de una vivienda
De todas las estancias de una vivienda, la cocina es la primera en la que se fijarán la mayoría de las personas interesadas, ya que si no está en buen estado puede suponer una gran inversión. La instalación de fontanería y los armarios son dos puntos clave que debes revisar y comprobar.
Además, es una estancia que se usa mucho y debe verse como un lugar espacioso y cómodo. Si tienes la posibilidad de ampliar sus metros, te recomendamos que lo hagas. Recuerda que una cocina en buen estado será un gran incentivo para que se decanten por tu vivienda en comparación con otras similares.
Otro factor a tener en cuenta son las ventanas. No es casualidad que nueve de cada 10 compradores de vivienda en España escojan pisos exteriores: la razón es la luminosidad. Si tu casa cuenta con grandes ventanales bien situados que permiten pasar la luz, será una gran ventaja, puesto que convierten un hogar en un espacio a la vez cálido y aireado.
En el caso de que tengas problemas de aislamiento, o si consideras que puedes ampliar el área de la ventana, te recomendamos que optes por cambiarlas por unas que ofrezcan un buen control de la temperatura de las estancias.
En relación a la sala de estar y las habitaciones, mejorar su aspecto es muy sencillo. Solamente renovando la pintura de las paredes con colores claros que den sensación de amplitud, la primera impresión será diferente.
Escoge una decoración neutra y cuida los detalles de tus visitas
Para que una visita de alguien que tenga interés en la vivienda sea todo un éxito, es fundamental que te asegures de que todo está bien ordenado. No solo dará una buena imagen de la casa, también dice mucho del propietario o propietaria de la misma. Opta por quitar objetos personales, así facilitarás que otras personas se puedan imaginar viviendo allí.
Como se ha mencionado antes, la luz es clave en una visita. Si el interesado no puede acudir en una hora en la que el sol incida con más fuerza en la casa o si ésta no es especialmente luminosa, alíate con luces artificiales que compensen esta carencia.
En las esquinas y puntos oscuros puedes colocar lámparas de luz blanca. Un pequeño truco es poner espejos en las paredes que están frente a las ventanas. Así se reflejarán los rayos del sol y dará la sensación de que la estancia es más grande.
Amuebla y decora el resto de habitaciones pensando en resaltar la vivienda. Por ejemplo, las alfombras aportan calidez y transmitirán la impresión de que se trata de un lugar acogedor.
Si realmente quieres destacar por encima de otras casas, anímate a seguir las técnicas del marketing sensorial. Nos referimos a recibir a las visitas con buenos olores al entrar a casa, ambientadores florales o incluso preparar café dará una sensación hogareña.
Con estas mejoras, tu casa estará lista para las fotografías profesionales que resalten todas sus virtudes. Sin duda, tu anuncio destacará por encima de la media.
¿Y si no puedo invertir ni tiempo ni dinero en una reforma?
Llevar a cabo estas reformas es casi una garantía de éxito y facilitarán que tu vivienda se venda más rápido. Sin embargo, no todo el mundo puede invertir ese dinero o dispone de tiempo para gestionar las mejoras de su casa.
En estas ocasiones en las que la persona propietaria necesita vender la vivienda rápida y cómodamente sin perder tiempo, la mejor alternativa es venderla a una de las numerosas empresas que compran pisos. Estas compañías no tienen en cuenta el aspecto del piso, solo su estado general, y gracias a que cuenta con financiación propia pueden hacer ofertas en solamente 24 horas y comprar una casa en apenas 7 días. Se trata de la mejor opción para quienes buscan una venta rápida y sin complicaciones.