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Hogar

Cómo construir una casa ecológica

Qué gran reto construir una casa ecológica. Qué difícil puede parecer, pero qué gran satisfacción cuando esté terminada, sobre todo sabiendo que cumple con esos valores respetuosos hacia los recursos y el medio ambiente.

La construcción de una casa ecológica puede parecer difícil, pero una vez en pie sólo vamos a ver un modelo autosuficiente que permitirá ahorrarte algún dinero y estar en paz con la madre Tierra.

Por ello, a continuación te damos las claves para construir una casa ecológica:

Situación de la casa y sus elementos

La orientación de la casa es el primer paso a dar, de manera que se aproveche de la mejor manera la iluminación y la ventilación naturales, reduciendo así el consumo de electricidad por “culpa” de lámparas o aires acondiciones. Del mismo modo, colocar las ventanas de nuestra casa ecológica a la misma altura y en lados enfrentados permitirá que el aire pueda circular y que, por lo tanto, no haga tanto calor durante los meses veraniegos. Por otra parte, colocar tragaluces o ventanas cenitales permitirá que el calor salga por ellos y disminuya la sensación agobio.

Materiales de construcción

Si estamos tratando de construir una casa ecológica con la que reducir el gasto energético hay que ser consecuentes a la hora de elegir los materiales que van a darle forma a este hogar verde. Por ello, es recomendable buscar esas maderas más sostenibles y cuya explotación haga menos daño al medio ambiente. La madera de eucalipto o de pino es una buena opción, pues deprende una cantidad más baja de CO2. Y para los suelos es ideal la madera de bambú, ya que crece cuatro veces más deprisa que el resto.

Y antes de proseguir queremos ofreceros una guía con respecto a la contaminación que provocan los materiales que habitualmente se usan en la construcción de casas y edificios (de menor a mayor daño ambiental):

  • Ladrillo de adobe sin cocer.
  • Ladrillo normal.
  • Bloques de hormigón.
  • Metales como el cobre y el aluminio.
  • PVC (que es bastante contaminante).

Aísla bien tu casa ecológica

Sobre todo de cara al invierno. No dejes que ningún elemento frío entre en tu casa durante los meses invernales ni que el calor de dentro salga, de esta manera ahorrarás en calefacción y electricidad. Para ello utiliza ventanas que aíslen correctamente o materiales ecológicos aislantes para determinadas partes de la casa como la madera, las fibras de maíz, el corcho, el cáñamo o la celulosa.

Aprovechamiento de los recursos naturales

Pero no sólo queremos ahorrar energía, sino que generarla es también un buen recurso para continuar con ese ahorro. Algunas opciones son: energía solar fotovoltaica o térmica, eólica, geotérmica, generador de biocombustible o calderas de biomasa. La cocina de biogás o recoger agua de lluvia para luego depurarla y utilizarla para su consumo o para riego también son otras opciones para contribuir a que tu casa ecológica haga honor a su nombre.

Casa ecológica = inquilinos ecológicos

Unos buenos hábitos te ayudarán a estar más acorde con el tipo de vivienda que has construido. Para ello, sé consecuente con las tres erres de la sostenibilidad: reduce, reutiliza y recicla. Por ejemplo: utiliza leds para la iluminación, emplea cisternas de doble carga, construye tus propios muebles o restáuralos (en general, compra menos y mejor dale uso a objetos antiguos), ¡o cultiva tu propio huerto bio!

Y si estás verdaderamente decidido a construir tu propia casa ecológica pero necesitas el asesoramiento de un experto, no dudes en solicitar la ayuda de los mejores profesionales de la construcción de Zaask.